lunes, 18 de enero de 2016

Extremos

Nos pasamos la vida intentando arreglar personas que quieren seguir rotas, y no. Creo que del amor al odio no hay un paso, creo que dentro del odio hay amor y dentro del amor hay odio, creo que son sentimientos complementarios porque un sentimiento implica la posible existencia del otro, el hecho de que pueda aparecer. Porque lo vuelvo a repetir odiar es darle demasiada importancia a alguien, y amar es darle toda la importancia a alguien. Y que difícil es darle la importancia justa a alguien cuando somos de extremos, cuando somos completamente exagerados, cuando nos queremos sin remedio, cuando nos odiamos con ganas, cuando no sabemos terminar, porque tenemos miedo de que no podamos encontrar algo nuevo. No estoy hablando de quererse mal, estoy hablando de no saber quererse, de no saber que va a pasar e improvisar cada paso que damos. Ser una puta montaña rusa, no saber como vamos a estar mañana, querer al día, vivir de verdad. No estoy hablando de que sea lo mejor, pero es lo que hacemos, la inteligencia emocional cuando nos tenemos enfrente sale volando, y solo estamos nosotros dos y un ahora que parece eterno. Y lo siento, por esta forma de querernos tan tonta, porque lo siento de verdad. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario